Voy a verte, me quedan días, sólo eso, días. Me puede ya la impaciencia y la angustia, estoy que me subo por las paredes, que pellizco cristales, que araño el agua y hasta que me como el cielo. Y es que no me lo voy a creer cuando te vea, cuando te toque, cuando pueda sentir tu respiración y la mía al unísono como antes.Y cuando te bese...creo que rozaré el paraíso. Mirarte a los ojos, sentir ese cosquilleo en el estómago, sonreir como una tonta y quedarme así para el resto del día. Amaré el momento en el que vuelvas a susurrarme al oído que me quieres y me abraces, es una de las cosas que más extraño y necesito, nunca jamás pensé que te convertirías en una adicción tan inmensa. Acaparas toda mi atención, mis cinco sentidos están puestos en ti y hasta ese sexto que dicen que sólo las mujeres tenemos, pues hasta ese está ahí para ti. Te echo tanto de menos que todas las noches me he dedicado a abrazar mi almohada pensando que eras tú y hasta le he puesto tu nombre. Lo dicho, eres mi droga cariño.
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